¿CIENTOS DE CURRICULUMS Y TODAVÍA NO TIENES UN EMPLEO?

Aquí está lo que cualquier buscador de empleo secretamente desea al buscar trabajo.

8:00 a.m. Ves un anuncio para el trabajo de tus sueños: cerca de casa, haces uso de tus habilidades, ofrecen el sueldo adecuado.

8:05 a.m. Te postulas para el trabajo.

8:07 a.m. El gerente de reclutamiento, sin aliento, te llama. “Te necesitamos. El Director General dijo pagarte cualquier cifra que pidas – te necesitamos en nuestro equipo tan pronto como sea posible!”

8:10 a.m. Después de que estableciste tus condiciones (un sueldo muy alto y acceso al jet privado de la compañía), envías por fax la oferta de trabajo.

8:15 a.m. Te diriges hacia la puerta a tu primer día de trabajo.


En la realidad el proceso toma unas pocas semanas o meses más, y tu probablemente no obtengas cada una de las cosas que deseas. Además, no escucharás ninguna llamada de vuelta de las compañías que tú piensas que cumplen mejor con tus requerimientos perfectamente, y lleva semanas el obtener una entrevista después de mandar tu curriculum y postularte.

Probablemente pases unos cuantos días (por lo menos) frotándote las manos sobre si habrás encontrarás o no alguna vez trabajo. No importa quién seas y en que giro te desempeñes, la ansiedad es solo parte del proceso. Pero cada quien tiene un límite personal diferente, y después de muchos curriculums, empezarás a preguntarte, “He mandado cientos de curriculums y postulaciones -- ¿Por qué nadie me contrata?”

Enseguida te presentamos una lista para que la revises y, o pongas tu mente en descanso (“No soy yo, son ellos”) o cambies por completo tu estrategia de búsqueda (“Bueno, quizás podría ser yo”). Quizás los factores que estén retrasando el éxito de tu búsqueda no están a tu alcance. Pero no te quita nada con echarles un vistazo nuevamente.

Ubicación
Antes de empezar a culparte a ti mismo por no obtener ninguna pista, da un vistazo al área en la que te encuentras. No todas las ciudades tienen el mismo mercado de trabajo. Un exceso de empleos en la construcción en el norte del país bien podría ser el polo opuesto de la situación en algún estado del sur. En caso de poder o querer reubicarte para tu trabajo es una cuestión personal, pero tu deberías considerar la tasa de desempleo de tu región al evaluar cómo va tu cacería de trabajo.

Qué trabajos
Cuando te das cuenta de cuantos trabajos has aplicado y postulado y de cuantos haz tenido respuesta, quizás los quieras dividir en dos columnas: trabajos que tu esperabas obtener y trabajos para los que aplicaste sin alguna razón.

Muchos buscadores de empleo deciden el mandar postulaciones para trabajos que saben que no califican, ya sea que ellos solo quieran un cheque de quincena o ellos piensen que sería divertido el intentar trabajar completamente en un campo sin relación – aunque ellos sepan que las posibilidades de que les llamen son prácticamente nulas. Estas acciones son perfectamente aceptables, pero no consideres los fracasos el ser, fracasos. Los trabajos que se ajusten a tu experiencia, educación y habilidades son los que deben de ser la fuente de tus éxito.

El curriculum
Aquí es en donde muchas cosas van mal. Ese pedazo de papel, digital o copia, causa muchos problemas. En seguida una mirada rápida acerca de lo que deberías revisar:
¿Tu información de contacto (incluyendo tu nombre) está enlistado para que el reclutador pueda llamarte o mandarte un correo electrónico?

¿Comparaste el contenido a la oferta de trabajo? Utiliza las mismas frases, menciona experiencia que relacione los requerimientos y da ejemplos específicos de logros que intriguen al empleador.
¿Enviaste el curriculum como un documento anexo en un correo electrónico? Por razones de seguridad, muchos reclutadores no abrirán los documentos adjuntos, así que tu curriculum quizás podría pasar desapercibido. Además de adjuntarlo, pega en el cuerpo del correo electrónico tu curriculum para estar seguro.

¿Proporcionaste una carta de presentación adjunta al curriculum? La ausencia de esta puede significar “desconsideración” para algunos gerentes de reclutamiento.

La entrevista
Si ya has sido llamado para ser entrevistado, entonces te encuentras haciendo algo bien. El no obtener un trabajo después de una entrevista no significa que lo echaste a perder – significa que te encuentras dentro de una lista de quien es considerado para cubrir una vacante, pero probablemente alguien más halla llenado mejor los requisitos. Pero nunca está por demás revisar tu desempeño dentro de la misma.

Una entrevista es frecuentemente la oportunidad para el empleador si tu encajas en la compañía y su entorno. ¿Eres muy rígido para un ambiente casual? ¿Tus habilidades de comunicación verbal son lo suficientemente buenos para la vacante? Los gerentes de reclutamiento también usan esta oportunidad para aprender acerca de ti en una forma que no lo pueden hacer a través de un curriculum. Ellos quieren que trabajes en tu experiencia y contestes cualquier pregunta que tengan que hacerte.

Para dar una buena impresión, la preparación es la clave. No quieres sonar ensayado, pero practicar tus respuestas a preguntas, tu modo de saludar, como te sientas en la silla y cualquier otra cosa que puedas encontrar útil te ayudará. Si puedes evitar ser el venado ante las luces, serás capaz de concentrarte en la calidad de tus respuestas.

Apariencia
No es por ser superficial, pero la presentación significa mucho. Desde el diseño de tu curriculum hasta las arrugas en tu atuendo para la entrevista, tu profesionalismo está sindo juzgado. ¿cómo te estás presentando antes los empleadores?

No empieces tu carta de presentación con, “¡Hey!” y no la termines con un icono de cara sonriente. Tu curriculum no debe de estar lleno de imágenes de Clipart de mariposas y caras sonrientes. Y debes de dejar algunos espacios en blanco entre las secciones para que la página completa no se vea como un párrafo sencillo de texto. El gerente de reclutamiento necesita ver un candidato que tome el trabajo en serio, de hecho desde antes de que seas llamado para una entrevista.

Durante una entrevista, debes de vestir apropiadamente. No significa que tampoco exageres – digamos, un smoking para un asistente administrativo – pero significa que te vistas para el entorno y te veas como que pasaste tiempo preparándote. Si sabes que el entorno es de negocios casual, entonces no necesitas de un traje, pero aun así, necesitas planchar tus pantalones.

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